Es mejor estar bien informado para tomar la mejor decisión sobre nuestra salud.
Bombardeo de información, no saber cuales son las fuentes con mayor credibilidad en el medio del bienestar, es realmente el peligro por el que pasamos los neófitos en este tema.
Todos creemos saber del tema. Es decir, adaptamos los conocimientos que recibimos a la conveniencia de nuestro cerebro. Lo penoso es que nuestro cerebro está viciado de azúcar, entonces damos por hecho, por ejemplo, que la fruta es tan sana, que podemos comernos toda la fruta que queramos, los jugos que queramos, ya que es “un azúcar sana”.
Siempre nos vamos por los productos que dicen: “Ingredientes naturales”, “sin azúcar”, “light”, etc. y esto se debe a que no profundizamos en los temas de nutrición. Es un área tan vulnerable, que se recibe dependiendo del color del cristal con que se mira: Una cosa es la que nos dicen los expertos, otra la que nosotros entendemos y otra la…
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